El verdadero amor sólo se presenta una vez en la vida… y luego ya no hay quien se lo quite de encima. (Groucho Marx, El hotel de los líos)
Mi psicoanalista me advirtió que no saliera contigo, pero eras tan guapa que cambié de psicoanalista. (Woody Allen, Manhattan)
¡Hasta un niño de cinco años sería capaz de entender esto!… Rápido, busque a un niño de cinco años, a mí me parece chino. (Groucho Marx, Sopa de ganso)
No puedo, yo… yo tengo que volver a la ciudad… yo… yo tengo el seminario sobre la masturbación y, si no llego a la hora, empezarán sin mí. (Woody Allen, Zelig)
— Temo que cuando llevemos un tiempo casados, una hermosa joven aparezca en tu vida y te olvides de mí.
— No seas tonta. Te escribiré dos veces por semana. (Groucho Marx, Un día en las carreras)