Mercedes Dembo Barcessat me ha enviado hace unas horas varias fotografías de su álbum familiar en Larache, fotos maravillosas, muy bonitas, otro gesto más de los muchos que me regala Mercedes, siempre tan generosa; y esto me ha despertado esa nostalgia que, de pronto, se te remueve. Y he comenzado a ordenar esa ingente cantidad de fotos que he ido guardando de muchos amigos y paisanos que me han ido mandando estampas del Larache que, según la época, les tocó vivir. Así que he decidido continuar ese álbum de fotos larachense que comencé hace tiempo y que, con ésta, ya va por la página 16. Pero continuará…

****

****

****

****

Me contaba un amigo, y no voy a dar su nombre porque así me lo pidió cuando accedió a que relatara su historia, que decidió volver no hace mucho a Larache. Llevaba tantos años sin hacerlo que estaba muy nervioso, casi atemorizado. Había dejado su ciudad hacía más de treinta y cinco años. Me contó que iba acompañado de su mujer, que también es larachense, y que ella le había rogado no hacer ese viaje porque quería recordar Larache tal y como lo dejaron cuando se marcharon de allí en los años setenta. Pero él quería volver porque se había prometido que no moriría sin volver a ver su tierra.
Me contaba que conducía su coche y que le sudaban las manos sujetando el volante, y que cuando llegó al cruce de las ruinas del Lixus y Tlata de Reixana, y vio de pronto abrirse las salinas a la derecha y el perfil de Larache al fondo, se le nubló la vista y hubo de parar a un lado. Le temblaba el cuerpo, y notaba cómo el corazón se le quería escapar por la boca.
Me dijo que cuando dejaron los dos de llorar, observaron el viejo puente medio caído, y muchos edificios altos y desconocidos interponiéndose entre ellos y lo que recordaban de esa estampa. Y entonces se miraron y, sin decir nada, se quedaron un tiempo indeterminado allí metidos en el coche, sin enjugarse las nuevas lágrimas pero con las pupilas clavadas en Larache, y que, también sin decir nada, volvió a arrancar el coche, giró en redondo y regresaron sin cruzar el Lucus.
Sergio Barce, julio 2015

****

****

****

****

****

****

****

****

****

****

****

****

****
20 respuestas
Que preciosidad de álbum de fotos querido Sergio, Mercedes yo tengo esa misma foto de los Amselem, y por el relato del matrimonio que temía volver a Larache, a mis padres en 1985 les pasó lo mismo, fueron a Larache, mi padre z´l muy emocionado por el reencuentro con la ciudad que dejó casi 30 años atrás, pero sufrió la decepción de no ver a sus amigos, la gente que conocía, negocios, y otros….salió y juró que nunca mas regresaría, que prefería acordarse de como la dejó la primera vez…..son cosas que pasan, sin embargo, yo si he regresado y siempre me emociono…
Sergio ya tengo tu libro La Emperatriz de Tánger, lo compré en La Casa del Libro.
Saludos y gracias por compartir.
Gracias a ti, Raquel.
Algo parecido le ha pasado a mi padre, porque él no quería volver, sólo lo hizo una vez, y sin embargo mi madre regresó una y otra vez, y ya ves, su último viaje fueron sus cenizas el pasado año.
Me alegra saber que pudiste comprar la novela, a ver si te gusta. Un beso muy fuerte
En nuestros corazones, hay dos opciones, ambas respetables. Tu madre, MARU, optó por la de aceptar la realidad y, desde ella, revivir sus recuerdos, pero también vivir de lo que de su ciudad y sus paisanos seguía recibiendo: cariño y hospitalidad, que no es poca cosa.
Por eso quiso que sus cenizas estén donde están. ELLA, está como poco en un sitio bien hermoso: EL RINCÓN DE LARACHE QUE TODOS TENEMOS EN EL MÁS ALLÁ; no sé si será el cielo. PERO MECIDOS POR EL ATLÁNTICO y acunados por la GABA.
CARLITOS
Gracias, Carlitos, muy bonito lo que dices; y sí, yo creo que ella está en su cielo, que era Larache, en el Balcón del Atlántico, a donde llevamos sus cenizas. Un abrazo
Gracias Sergio por poner tantas hermosas fotos. Yo todavia no realice mi sueno de volver a Larache desde que sali de Marruecos en 1967, no se me kutbeo.
Un abrazo.
No pierdas la esperanza Merche, seguro que pronto podrás ir, y si te animas vamos juntas, quizás el mes que viene yo vaya de nuevo, estamos en España y siempre lo hacemos….
Saludos
Ya irás, Mercedes, como dice Raquel. Y seguro que será tu viaje más emocionante.
Besos
antes de ir a larache pasate pasate por andorra que de esta manera te veremos.
Preciosas fotos, entrañables…
María Llaves Llorca podría haber sido la Sofía Loren larachense…
Un beso
Toda la razón Joana, que señora tan guapa, cuando vi la foto pensé de inmediato en Sofía Loren….
Que álbum tan bonito te felicito Sergio , Mercedes a mi tampoco se me kutbeo ir a larache desde que salí. Mi Madre tiene un álbum de toda su famila, cuando vaya a Israel los voy a mandar fotos para de la vean, Saludos.
Gracias, Elías. En cantado de que las mandes.
Un abrazo
Simepre me emcociono cuando veo una foto de mi profesor de Español, Isaac Barcessat. Enseguida vuelvo a Zoco el Arba y me viene su voz a la memoria y sus gestos. Siempre le tuve aprecio, pero solo ahora he comprendido cuanto. Descanse en paz monsieur Barcessat. Cuando veo la foto de Simja Amselem, hermosa mujer donde las hubo y madre de mi amigo Coco o la de Plata Amselem, prima o sobrina de mi abuela Luna, no puedo evitar volver al pasado.
Gracias de nuevo Sergio y magnífico el estudio que hace nuestro amigo Enrique de tus novelas.
Gracias a ti, León, como siempre.
Un abrazo
bonitas fotos,no conozco casi a nadie,no hay muchas de la comunidad judia.Mihija estahoy en Larache,he regresado dos veces y pienso muy pronto, noimportua comoeste, nosotros tambien hemos cambiado, cosas del. tiempo
Sin duda, muy bella María Llaves Llorca.
Pero me gustaría recordar y, así lo creo, que famosa fue en Larache la belleza de SIMHA MORYUSSEF, esposa de Abraham AMSELEM BENMAMAN, «nuestro farmacéutico». Sobre todo se puede apreciar en la tercera de las fotografías que aparecen.
Para sus hijas, un fuerte abrazo.
CARLOS
Hola querido Sergio , me he llevado una grata sorpresa cuando descubro mi foto en este album que has recopilado, gracias, besos
Me alegro de que te haya gustado verte aquí, Yamila. Eres parte de mis recuerdos, ya lo sabes, y esa foto tuya me encanta.
Un beso enorme para ti.
Como siempre removiendo sentimientos. Me hace ilusión ver mi foto con Rosabel una muñeca andadora que me trajeron de Alemania los Reyes Magos. Gracias Sergio
Eso sí que eran Reyes Magos de verdad… jjj Un beso, Carmen.