Es la tercera vez que cuelgo fotografías de Javi Lobo, un larachense que guarda las imágenes que más ama en su corazón y en la memoria de su cámara de fotos.
Me suele enviar las que hace, y aunque es difícil escoger cuáles poner y cuáles descartar, creo que la opción de ir mostrándolas con cuenta gotas nos sale rentable a todos.
A mí, porque voy dando pinceladas a cada tiempo con estas fotos, llenas de cariño, para darle vida a este blog, y a los que las contempláis porque las descubrís poco a poco, lo que les da mayor valor, si cabe.
Como esta imagen del Balcón del Atlántico, todas ellas son fotografías que hablan por sí solas, que a cualquier larachense le hace recordar algo: una vivencia, una experiencia, una escena de su vida, un lugar en el que sucedió ese acontecimiento especial para él o para alguien de su entorno.
Son los rincones que hemos transitado una y cien veces, indisolubles a nosotros. Cada una de las calles de Larache guarda una y cien historias. Javi Lobo, a lo largo de los años, las ha ido recopilando, y, ahora, son como un pequeño baúl de recuerdos en el que ir contemplando el cambio de la ciudad…
También las playas están tan unidas a nuestras experiencias que merecerían un capítulo aparte: la playa de Miami, la playa peligrosa, la de la otra banda…
Pero al igual que las calles, las playas, los rincones históricos de Larache, Javi Lobo no deja de observar los pequeños detalles, como los bakalitos, los vendedores de verduras, las barberías… Estas son las imágenes del hombre que no abandona el cálido afecto por su pueblo, por su Larache.
Javi Lobo, y su mujer Angela, son dos personas excepcionales, que siento muy cerca de mí. Áquí la fotografió con Mohamed Sibari:
Angela y Javi, larachenses, dos fantásticas personas, pero mejores amigos.
Sergio Barce
Un comentario
A cual más entrañable y bonita… aunque la del «bakalito» es especial para mí, me trae cantidad de recuerdos… los bakalitos de mi infancia en Larache, en Casablanca, en Tánger… pero también me asaltan los recuerdos con la de la playa de la otra banda.
Eso es, Sergio, ofrécenoslas poquito a poco, para irlas saboreando pausadamente, llenando nuestra memoria de un tiempo feliz que no podremos ni queremos olvidar.
Cuánto bien me produce siempre sumergirme en todos tus textos!!
Hoy es un día muy gris pero abriendo el blog se iluminó la estancia y se impregnó de estas estupendas tomas de Javi Lobo y de la esencia de Larache!!
Recuerdos… recuerdos… tantos recuerdos…