Alejandro Escoto y Emilia Vázquez, son otros dos amigos y paisanos a los que les tengo un cariño especial. Soy una persona afortunada, de eso no hay duda, por contar con tal cantidad de personas con las que me une el afecto y la amistad. Emilia y Alejandro se pasaron hace apenas un par de días por Larache, por su pueblo, y me han enviado las siguientes fotografías del estado actual de nuestro Balcón del Atlántico.
Ésta es la imagen que presenta la parte del Balcón que no se ha tocado aún. Como decía en mis anteriores artículos, la desidia, la falta de limpieza y de mantenimiento de la balaustrada le ha llevado a tener este penoso aspecto. Sin embargo, ésta y no otra es la balaustrada clásica, la imagen ligada a Larache y a su gente, y ésta es la que requiere de una actuación urgente que la recupere y la reconstruya.
Las siguientes fotografías tomadas por Alejandro, nos muestran la parte del nuevo balcón que ya lleva un tiempo terminada, consistente en una serie de terrazas a diferentes niveles que bajan por el acantilado. El proyecto diseñado, extiende estas terrazas también por el centro del actual Balcón, es decir, lo que aún no se ha derribado, aunque ya hay una parte de esas terrazas que quedan bajo la vieja balaustrada, rompiendo la sensación de estar sobre el acantilado.
Sobre gustos no hay nada escrito, pero lo cierto es que este diseño de terrazas, impersonal, copiado de cientos de terrazas idénticas ya existentes en diferentes ciudades, desnaturalizan, en mi opinión, la singularidad del Balcón del Atlántico de Larache. Hay cosas que pertenecen al patrimonio de una ciudad, y hay cosas que pasan a formar parte del patrimonio sentimental de varias generaciones.
Si miramos al Atlántico, estas terrazas quedan a nuestra izquierda y parte de ella bajo el propio actual Balcón, mientras que el viejo Balcón que se mantiene en pie, lo que queda de él, ocupa nuestro frente y nuestra derecha, hacia el Castillo de San Antonio. Los derribos que se denunciaron los pasados días se encuentran también en la zona izquierda, y tienen por objeto dar mayor acceso a las terrazas de bajada que se muestran en estas fotografías.
A esto se le llama modernidad, creo. Sin embargo, la modernidad no es incompatible con el desarrollo y protección del patrimonio arquitectónico y urbano de una ciudad. Larache es conocida y reconocida por su viejo Balcón del Atlántico, que no nos engañen; un mirador único y diferente. La conjugación racional de los servicios públicos adecuados para la población y la defensa del propio patrimonio sirve no sólo para beneficio y provecho de sus moradores, sino para mostrar al visitante la riqueza de su historia y de su pasado. Larache es una ciudad marroquí, y su historia se alimenta de influencias culturales marroquí, por supuesto, pero también fenicia, romana, árabe, hebrea, española, portuguesa… Sevilla es muy española, pero nadie imagina Sevilla sin su Giralda o sin su Torre del Oro, árabes.
Pongamos un ejemplo ingenuo o simplista, pero muy clarificador: Supongamos que las autoridades de Marrakech deciden mañana que la famosa plaza de Yamaa el Fna va a ser rediseñada, que van a poner una fuente en medio y un edificio para que los comerciantes puedan montar sus puestos en el interior… Alguien argumentaría que eso es la modernidad, que lo viejo es mejor tirarlo o cambiarlo, pero lo cierto es que habrían acabado con la tradición, con la historia y con la memoria de esa ciudad. Nada sería ya igual. Y quienes viajan desde todos los puntos del planeta para ver la famosa plaza dejarían de hacerlo porque, ¿a quién el interesa visitar otro centro comercial más? Igual le ocurre a nuestro Balcón del Atlántico… ¿A quién le interesa descubrir otra terraza identica a la que se puede ver en otra ciudad española, portuguesa o marroquí? No confudamos lo viejo con lo antiguo, porque no es lo mismo.
Me confirman que, efectivamente, la maqueta del proyecto contempla el cambio en todo el Balcón. También me confirman que se ha comenzado a recoger firmas en Larache contra ese proyecto, con el objetivo de que, al menos, se restaure lo que aún queda del viejo y querido Balcón del Atlántico de Larache. Que así sea. Incha Al´láh.
Nada que ver con el mirador auténtico e incomparable que teníamos… qué rápido ha ido todo -cuando quieren- de verdad no pensaba que las obras estuvieran tan adelantadas…
Nos han borrado así, sin más, un trozo de historia, lo dejaron morir poco a poco. Ojalá se consiga salvar ese último tramo de Balcón tan valioso para todos!!
Y nosotros afortunados, Sergio, de poder acceder y compartir este rincón excepcional que es tu blog.
Tout cela n’est que triste réalité et il est grand temps de mobiliser non seulement les larachois, mais aussi tout les marocains pour sauver le patrimoine architectural de cette ville. Ce n’est pas une survivance de la colonisation, c’est devenu une propriété nationale à défendre d’urgence. Il faut arrêter d’uniformiser toutes nos villes, ce n’est pas uniquement le soleil et la mer qui feront venir les millions de touristes que nous souhaitons pour dynamiser notre économie, c’est aussi en sauvant les particularités régionales.
Mehdi
Por Dios!…qué pena, qué han hecho con nuestro balcón del Atlántico??…bueno, el recuerdo no lo podrán borrar nunca…por más que lo intenten. Gracias Sergio por este rincón que nos muestras.
Mi primer cigarro que me fume fue en la glorieta del Balcon Atlantico con once años, me sentó tan mal, que no volvi a fumar jamás y ya tengo setenta y dos años, ya ves si me acuerdo de mi querido Balcón.
Agapito
Terminaran cambiandolo todo y llegara el dia que vayamos a nuestra añorada Larache y no sea ni la sombra de la que nosotros conocimos pero todo cambia con el paso del tiempo y no podemos pretender que siga igual que cuando vivimos alli.Mi recuerdo lo llevo siempre en mi mente y por mucho que cambien todo,Larache sera para mi la misma que conoci.
EMILIA SOUSA
Puede ser que cambien el BALCON, no hay solución, como dice Emilia Sousa, en nuestras mentes y nuestro corazón quedará nuestro BALCON, ya no podremos apoyarnos y estar unos minutos callados mirando al horizonte. Pero lo que nunca podrán cambiar es la segunda parte, «DEL ATLANTICO», ese océano que nos ha bañado todo el tiempo que hemos permanecido allí, que nos ha visto nacer, que nos ha hecho disfrutar y oler esa brisa característica que no he sentido jamás en ningún otro sitio. Ningún alcalde, ingeniero ni arquitecto podrá cambiar nuestro océano ATLANTICO de Larache. Gracias Sergio.
borrar la memoria de las piedras, es borrar la memoria de los siglos, de las generaciones, de las culturas antiguas – esto se hace con bombas o con modernización – para instalar «the global governance».
¡¡Qué horror de barandilla!! ¡Y de hierro! Parecen las de los balcones de algunas casas de VPO. Con el buen gusto que caracteriza al arte y la arquitectura árabe, no entiendo, cómo han hecho algo así, tan impersonal, tan feo. Eso sí, ten por seguro que, ya que se han puesto, van a cambiar todas las barandillas del Balcón. Y ojo, que aquí en Málaga también se han hecho muchas tropelías arquitectónicas, y hay lugares que no los reconoce ni…
Hombre, a mí no me parece mal lo que han hecho porque han modernizado una parte del balcón que estaba abandonado, es preferible así que al menos es una infraestructura que aunque diferente es práctica y moderna.
El paso de los años es inevitable y no podemos mantener los edificios como los recordamos de nuestra infancia.Eso queda para el recuerdo.
Saludos.
Paco Muñoz.
11 respuestas
Nada que ver con el mirador auténtico e incomparable que teníamos… qué rápido ha ido todo -cuando quieren- de verdad no pensaba que las obras estuvieran tan adelantadas…
Nos han borrado así, sin más, un trozo de historia, lo dejaron morir poco a poco. Ojalá se consiga salvar ese último tramo de Balcón tan valioso para todos!!
Y nosotros afortunados, Sergio, de poder acceder y compartir este rincón excepcional que es tu blog.
Menuda «jará»
Tout cela n’est que triste réalité et il est grand temps de mobiliser non seulement les larachois, mais aussi tout les marocains pour sauver le patrimoine architectural de cette ville. Ce n’est pas une survivance de la colonisation, c’est devenu une propriété nationale à défendre d’urgence. Il faut arrêter d’uniformiser toutes nos villes, ce n’est pas uniquement le soleil et la mer qui feront venir les millions de touristes que nous souhaitons pour dynamiser notre économie, c’est aussi en sauvant les particularités régionales.
Mehdi
Por Dios!…qué pena, qué han hecho con nuestro balcón del Atlántico??…bueno, el recuerdo no lo podrán borrar nunca…por más que lo intenten. Gracias Sergio por este rincón que nos muestras.
Pues está la mar de chulo… veis como no hay que ser tan alarmistas.
Mi primer cigarro que me fume fue en la glorieta del Balcon Atlantico con once años, me sentó tan mal, que no volvi a fumar jamás y ya tengo setenta y dos años, ya ves si me acuerdo de mi querido Balcón.
Agapito
Terminaran cambiandolo todo y llegara el dia que vayamos a nuestra añorada Larache y no sea ni la sombra de la que nosotros conocimos pero todo cambia con el paso del tiempo y no podemos pretender que siga igual que cuando vivimos alli.Mi recuerdo lo llevo siempre en mi mente y por mucho que cambien todo,Larache sera para mi la misma que conoci.
EMILIA SOUSA
Puede ser que cambien el BALCON, no hay solución, como dice Emilia Sousa, en nuestras mentes y nuestro corazón quedará nuestro BALCON, ya no podremos apoyarnos y estar unos minutos callados mirando al horizonte. Pero lo que nunca podrán cambiar es la segunda parte, «DEL ATLANTICO», ese océano que nos ha bañado todo el tiempo que hemos permanecido allí, que nos ha visto nacer, que nos ha hecho disfrutar y oler esa brisa característica que no he sentido jamás en ningún otro sitio. Ningún alcalde, ingeniero ni arquitecto podrá cambiar nuestro océano ATLANTICO de Larache. Gracias Sergio.
borrar la memoria de las piedras, es borrar la memoria de los siglos, de las generaciones, de las culturas antiguas – esto se hace con bombas o con modernización – para instalar «the global governance».
¡¡Qué horror de barandilla!! ¡Y de hierro! Parecen las de los balcones de algunas casas de VPO. Con el buen gusto que caracteriza al arte y la arquitectura árabe, no entiendo, cómo han hecho algo así, tan impersonal, tan feo. Eso sí, ten por seguro que, ya que se han puesto, van a cambiar todas las barandillas del Balcón. Y ojo, que aquí en Málaga también se han hecho muchas tropelías arquitectónicas, y hay lugares que no los reconoce ni…
Hombre, a mí no me parece mal lo que han hecho porque han modernizado una parte del balcón que estaba abandonado, es preferible así que al menos es una infraestructura que aunque diferente es práctica y moderna.
El paso de los años es inevitable y no podemos mantener los edificios como los recordamos de nuestra infancia.Eso queda para el recuerdo.
Saludos.
Paco Muñoz.