El pasado viernes acudí a un pequeño encuentro literario en el Taller de Pintura de Paco Selva, que tuvo la deferencia de invitarme para hablar de mis novelas y relatos con lo integrantes del Grupo Capitel, formado por artistas, tanto escritores como plásticos. Y la verdad es que fue un encuentro muy agradable y distendido. Además, lo aderezaron con un buen vino, y hasta con chuparquía. Uno de sus integrantes es Víctor Pérez, poeta, que ha escrito un pequeño comentario de nuestro encuentro y de mi última novela, que acababa de leer. Con su permiso, comparto con todos vosotros sus impresiones.
Sergio Barce, abril 2012
Sergio Barce en «Capitel»
por Víctor Pérez Benítez
Sergio Barce nos visitó el Viernes día 30, fue una velada especial, la personalidad de este escritor nos llenó, nos inundó de color a Larache, de aromas exóticos, de especias sabrosas de una tierra tan cercana geográficamente y tan alejada en otros aspectos.
Sergio nos habló sobre sus experiencias de niño en Larache, de su llegada con 13 años a Málaga donde estudió en los Maristas, del contraste de una ciudad a otra, del sueño del recuerdo que siempre le lleva a escribir sobre sus emociones y sus diversiones de aquel paraíso perdido.
«El jardín de las Hespérides», «Ultimas noticias de Larache», «Retrato en sepia» y su último «Una sirena se ahogó en Larache» son obras que fueron comentadas por el autor, en todas ellas como digo, corre un río de recuerdos que le unen a esa joya atlántica, a ese territorio que España amó y abandonó a su suerte.
«Una sirena se ahogó en Larache» es una novela que gira en torno a la vida, las aventuras y desventuras de un niño llamado Tami, un niño de nueve años que sueña ser Saladino y Barbarroja, un niño con un padre amargado por una existencia anodina, con un abuelo al que le une una relación especial, un hermano que solo desea escapar hacia España, de una pandilla de amigos que le acerca a la aventuras y a más de una desventura.
Recojo una parte que considero define un poco el estilo de la novela:
«Entran en el edificio y cruzan la zona del patio donde hay más gente a esa hora. Se adentran por la nave principal zigzagueando a la masa que se mueve lentamente por los pasillos interiores. A Tami le gusta esta construcción con sus tejados verdes, sus paredes blanqueadas, con ese aire de sueño nazarí que a él le parece un pedazo perdido de los antiguos palacios omeyas que hubiera llegado a Larache a la deriva empujado por las olas hasta dejarlo allí. Tami es imaginativo, todo lo transforma en algo más sutil, en algo más romántico, siempre una aventura.« Colores, olores, de especias y de fútbol, de risas y de llantos, de ternura y de crueldades, toda una amalgama intensa de sabores perdidos, de ambientes familiares que nos recuerdan nuestra infancia.
La aparición de la sirena envarada en la playa, solo es contemplada por Tami, la visión le induce a soñar con ella, es este momento donde la novela alcanza sus mejores momentos poéticos, realmente impresionante leer lo que el niño siente:
«…Las pestañas que parecen de sal… Las lágrimas de la mujer-pez son como tinta que escribieran un largo poema en sus mejillas ya secas, un largo poema cuyos versos piden auxilio...«
En definitiva, una buena selección como una de las novelas mejor escritas en Andalucía en 2011 y fuerte candidata para ser la mejor. (y eso que no he leído las restantes)
Y yo apoyo totalmente este comentario…»una de las novelas mejor escritas en Andalucía en 2011 y fuerte candidata para ser la mejor». Y animo a Víctor Pérez a que lea todo el resto porque son especiales, maravillosas e irrepetibles, llenas de vida y amor, de realidad y de sueños…
Un beso
2 respuestas
Y yo apoyo totalmente este comentario…»una de las novelas mejor escritas en Andalucía en 2011 y fuerte candidata para ser la mejor». Y animo a Víctor Pérez a que lea todo el resto porque son especiales, maravillosas e irrepetibles, llenas de vida y amor, de realidad y de sueños…
Un beso
Fue realmente una velada cálida e instructiva, buen rato.
Gracias Sergio.